sábado, 8 de noviembre de 2014

Duele más que no duela.


Hoy me siento muy agradecida, como la mayoría de las personas lo están al pensar en las bendiciones que tienen en su vida; por la salud, por el trabajo, por su familia. Sí me siento agradecida por todo eso pero también me di cuenta que lo estoy por algo más. Por el dolor.
Es raro, incluso para mi al principio, pero estoy segura que agradezco a Dios, le agradezco a la vida por el dolor, porque es similar al fuego que cambia y purifica.
Hoy en la mañana en un hospital de Guayaquil conocí el caso de una joven, sólo un año menor que yo, que estaba internada por una complicación de una rara enfermedad autoinmune que padece. Me impactó mucho escuchar su historia en realidad la forma en que la contó, hablaba de sucesos realmente dolorosos con tanta serenidad y aplomo, hechos de dolor relativamente recientes, los contaba como si fueran hechos que a todo el mundo le pasa. Sentí envidia y mucha admiración por ella, no porque soy una masoquista y quiero que me de una enfermedad similar, todo lo contrario. La envidio y la admiro porque a pesar de que tenemos casi la misma edad, ella ha sentido mucho más dolor y sufrimiento ha pasado por ese fuego más que yo, no se rinde, no se deja doblegar, ni siquiera su voz se quiebra incluso se la veia feliz a pesar de todo. Ojalá pueda convertirme en su amiga, porque desde ya me contagió ganas de seguir viviendo y saber usar bien el dolor.
Gracias a Dios por mi dolor, porque me va formando, porque es una olla a presión que me está preparando para tomar la oportunidad que representa cada día de ser feliz.
El dolor, el tiempo, la soledad, el sufrimiento, son cosas que no buscamos a propósito, pero cuando llegan lo hacen golpeando, modifican la estructura y la función, usemos nuestra capacidad reguladora y pidamos mucho al cielo para que todos esos cambios sean para bien, decidamos correctamente y agradezcamos por ello. Nunca dejemos de agradecer.

miércoles, 29 de octubre de 2014

Now I know!

Cuando cursaba el último curso de la primaria, tenía un libro de inglés que tenía una sección al final de cada lección que se titulaba "Now I know"(Ahora yo sé) y hacía un resumen de lo que habíamos aprendido.
Para mi esa frase desde aquella época ha sido muy importante, porque en  cada aprendizaje cosechado la digo en voz alta.
A pocos minutos de dejar de tener 22 años, con unas ganas de hacer algo trascendente, sólo se me ocurre tratar de enlistar lo aprendido en éste año de vida. Haré mi mejor esfuerzo, contando la hora y mi nivel de cansancio, asi que.
Ahora yo sé...

  • No hay certezas en este mundo, ni en otro, lo que creemos cierto es producto de nuestro subconsciente, quizás para mantenernos tranquilos, quizás sea sólo un mecanismo de defensa que nos permita seguir caminando y no fallecer con la horrible angustia que la incertidumbre produce.
  • Como se siente la angustia, y la incertidumbre; y en serio es horrible.
  • La felicidad  única y exclusivamente depende de nosotros mismos. Es nuestra decisión ser felices, así como lo es estar tristes, amargados, temerosos, es algo que debemos aprender a controlarlo y manejarlo a nuestro favor. Así como amar es una decisión.
  • Si tienes un sueño, meta, objetivo, por más pequeñito que sea, esfuérzate realmente por ello y si no llegara a resultar como querías, levanta el rostro e inmediatamente crea otro sueño y lucha por éste.
  • Tus padres, tu familia siempre te va a apoyar, no temas que no será así, ellos te aman y cuando tu seas feliz ellos también lo serán.
  • No pienses en lo que los demás quieren de ti, piensa en lo que tu quieres de ti, identifícalo, sueña y lucha por ello, porque el que vivirá contigo para siempre serás tu mismo.
  • Haz lo que verdaderamente te apasione, asi serás el mejor en lo que haces. Cuándo eres bueno en lo que haces no te faltará trabajo.
  • Recuerda a aquella persona que ya no está en su mejor momento, en sus momentos más felices.
  • Se siente genial ganar dinero y se siente mejor contar con tus ahorros en cualquier situación emergente.
  • Que la angustia me quita el apetito.
  • Soy hermosa y no necesito que nadie me lo diga, me siento y me veo hermosa, me obligo a que sea así.
  • Soy más fuerte de lo que aparento.
  • El dolor es más soportable cuándo respiramos profundamente, cuando hacemos nuestra respiración consciente.
  • Respirar profundo ayuda mucho a calmarme.
  • Me desahogo  escribiendo lo que me gustaría decirle o contarle a alguien.
  • Me gustaría vivir y hacer más cosas que las que he hecho en toda mi vida.
  • Quiero viajar por todo el mundo.
  • Lo que se siente tener sinusitis.
  • Como se siente trabajar y estudiar a la vez y llegar a la casa tan cansada con la sensación que tuviste un día productivo y te mereces descansar.
  • Manejar una Mac y trabajar con una.
  • Me encanta Dr Who.
Aprendí muchas cosas éste año, talvez la mayoría  de las que están en esta pequeña lista las aprendí en el último mes, con un acontecimiento traumático para mí pero intentando en todo momento encontrar la enseñaza de todo.
Ahora que ya se todo esto solo espero no olvidarlo y aplicarlo a mi vida, porque varias de ellas las conocía teóricamente pero no estaban interiorizadas, ahora las necesito y son parte de mi.